Unos días muy movidos ha tenido la reina Sofía. Esto se debe a su paso por Asturias, donde acompañó y brindó apoyo a su nieta, la princesa Leonor, y por Grecia en la boda de su sobrino Felipe con Nina Flohr.
El viernes 22 la reina Sofía arribaba a Oviedo, mientras que el sábado 23 viajaba a Grecia para presenciar la unión en matrimonio de su sobrino, realizada en la catedral de la Anunciación de Santa María de Atenas. La pareja contrajo matrimonio por civil el 12 de diciembre de 2020.
La reina Sofía es muy unida a la familia pese a tener pequeños momentos disponibles para verla, pues vive a gran distancia. Sin embargo, quiso aprovechar la velada para reencontrarse con sus seres queridos. Así, la madre del rey Felipe VI fue una de las últimas invitadas en arribar a la ceremonia ortodoxa y asistió acompañada de su hermana Irene.
Para la ocasión, lució un vestido en tono verde metalizado con un imponente collar de perlas y un rubí. Se trata de la pieza más importante de su joyero, no en cuanto al valor económico, sino sentimental. Se debe, ni más ni menos, a que es una joya heredada de su madre, la reina Federica. Además, Doña Sofía portó un pequeño bolso combinado con una pashmina en tonos marrones.
Su presencia en los Premios Princesa de Asturias
La reina Sofía no quiso dejar de acompañar a la princesa Leonor y se hizo presente en los Premios Princesa de Asturias celebrados en el Teatro Campoamor. Allí, su nieta brindó un sentido discurso y Doña Sofía no perdió oportunidad de posar junto a ella y demostrar cuánto aprecio le tiene.