Susana Bicho suele dar que hablar en las redes sociales por tratarse de una de las influencers más aclamadas por los usuarios. Su naturalidad, simpatía y, por supuesto, amor por la moda a partir del cual se ha convertido en un ícono en la materia, han hecho que la joven cuente ya con más de un millón de seguidores en Instagram.
No obstante, en este caso Susana Bicho aparece en la escena mediática no por algo relacionado con su trabajo o por algún look en particular que haya trascendido: la cuestión pasa por un drama por el que pasó la artista.
Es que Susana Bicho atravesó una “experiencia paranormal”. Así lo ha contado este martes ella misma a través de una historia de Instagram.
El hecho al que se hace referencia, tal lo relatado, sucedió cuando ella se quedó encerrada en su baño, puesto que no podía abrir la puerta por estar ésta estropeada.
Si bien no era la primera vez que le pasaba, ésta vez no estaba en casa su pareja, Guille, para abrirle la puerta. Tras estar más de una hora y media allí dentro, tiempo en el que ha visto tutoriales en YouTube, y utilizado pinzas de depilar, cuchillas, cartones y todo lo que se le ponía a su paso para que hiciesen de picaporte y poder abrir la puerta, se planteó llamar a un cerrajero. Pero esta opción fue rápidamente descartada, ya que sólo le quedaba un dos por ciento de batería y no se podía arriesgar.
Tras verse imposibilitada de salir de allí con los utensilios que encontraba, Susana Bicho se resignó y exclamó en alto "Ay, Dios mío, si existes, ábreme la puerta", tras lo cual se levantó e intentó probar por última vez de nuevo con las pinzas de depilar y... sí, ésta vez pudo abrir la puerta.
"Era como si alguien me la hubiera abierto desde el otro lado", relató Susana Bicho. "Me puse a llorar porque no sabía lo que sentía. Fui corriendo a contárselo a mi madre y ella se reía de mí", agregó
Un hecho que la marcó
En un tono medio jocoso, Susana Bicho contó que hasta este episodio no era una persona que creía o era muy devota de Dios, pero ahora lo es. "Yo no soy muy creyente. Bueno, no sé lo que soy, pero desde ahora soy creyente", concluyó con una sonrisa.