Rocío Flores ha vuelto a dar el presente en "El programa de Ana Rosa" luego de que su padre aseverara que se distanciará por completo de los medios de comunicación tradicionales para así escapar del escándalo generado por su separación de Olga Moreno. En este marco, la 'inlfuencer' dejó entrever lo que ya tantos presumían acerca del otrora Guardia Civil.
En primera medida, Rocío Flores calificó como "patético" todo lo que se anda diciendo acerca de su familia. Desde que la tercera en discordia entre su progenitor y Moreno es Marta Riesco. Hasta las aseveraciones de Belén Rodríguez, quien deslizó que el clan Flores se encuentra sacando rédito de la polémica que sigue ubicándose en el centro de todas las portadas ya que atraviesa un duro momento económico.
Acto seguido, le consultaron a la joven si cree en efecto que su padre se retirará de los medios tal como él mismo lo planteó. Y fue ante esta pregunta que la nieta de Rocío Jurado dejó ver, consciente o inconscientemente, lo que para muchos ya era un secreto a voces.
"¡Ni soy Rocío Carrasco ni soy Antonio David Flores! Soy una persona independiente. Yo soy yo y que cada uno diga o haga lo que quiera", exclamó Rocío Flores. De este modo, la mediática demostró que no pone las manos en el fuego por lo que dice su famosísimo padre.
Es decir, no se ha atrevido a darle la derecha al hombre que le dio la vida. Y prefirió responder evitando toda clase de afirmación tajante. "Yo soy yo", se defendió ante la atenta mirada de los colaboradores de "El programa de Ana Rosa". "No tengo ni idea", sumó acerca de lo que podría o no hacer su progenitor a futuro.
¡Tristeza en Málaga!
Con este contexto como telón de fondo, vale recordar que fue el jueves último cuando se la vio a Rocío Flores llorando en las calles de Málaga. La acompañaba su novio Manuel Bedmar. "Ro, derrumbada en plena calle", sentenciaban desde uno de los ciclos más emblemáticos de Mediaset.