Desde el desaparición física de Doña Ana a finales de septiembre, Kiko Rivera e Isabel Pantoja se propusieron acercarse un poco más y dejar de lado las disputas. El dinero de la familia era una de las cuestiones que había deteriorado del todo el vínculo madre e hijo entre ambos.
Kiko Rivera brindó más detalles del momento que vive con su madre en "Sábado deluxe". Según comentó el DJ, el día en que se vieron tras la pérdida de Doña Ana fue muy emotivo. Sin decirse nada, los dos se fundieron en un extenso abrazo que duró alrededor de quince minutos de acuerdo a los cálculos del 'influencer'.
Según Kiko Rivera, Isabel Pantoja reaccionó hablándole directamente a Doña Ana mirando al cielo: "Gracias mamá, has tenido que morir para que mi hijo venga a verme". "En ese momento volvió a ser mi madre, durante esos quince minutos era mi madre, la que yo necesitaba. Habría matado para que esos quince minutos hubieran durado una eternidad", añadió el músico.
Lo llamativo de la entrevista fue el momento en el que el DJ miró hacía dentro e hizo una fuerte autocrítica. "A mí se me parte el alma. Todos los planes que yo tenía en la cabeza se me van y me entra una sensación de culpabilidad tremenda, me siento un mal tío por haber pasado el último año sin hablarme con mi madre y por haberme despedido de esta forma de mi abuela", afirmó.
El dinero ya no importa
"Lo económico está perdonado. No voy a seguir luchando por eso, tengo una vida y quiero vivirla", insistió Kiko Rivera al respecto del motivo que lo había alejado de Isabel Pantoja en primera instancia. "El chip cambió de forma total", aseguró el DJ dejando en claro que sintió la necesidad de estar cerca de su madre en estos momentos difíciles.