Daniel César Martín Brühl González es el nombre completo de una de las más grandes estrellas de Hollywood de los últimos años. El aclamado intérprete que se hizo conocido simplemente como Daniel Brühl estuvo en Antena 3 y vivió grandes momentos con el famoso animador de la señal televisiva.
El martes por la noche fue Daniel Brühl el protagonista del programa de Pablo Motos. Allí aprovechó para promocionar "La puerta de al lado", su nueva película que supone el debut del actor como director. Además, la estrella de cine será protagonista de su propio film que llegará a las salas de cine este viernes 19 de noviembre.
Una de las primeras cuestiones que sorprendió a Pablo Motos y a su audiencia fue el hecho de que Daniel Brühl hablar perfectamente español. Según explicó el protagonista de "Good By Lenin", él nació en Barcelona, creció en Colonia, vivió en Berlín y ahora estableció residencia junto a su familia en Mallorca.
A su vez, Daniel Brühl mencionó detalles de la trama de "La puerta de al lado". "Empieza como una comedia ligera y se convierte en una comedia muy oscura, en un thriller. Es un duelo en un bar de Berlín entre dos vecinos. Y mi personaje, que es un actor famoso, descubre que su vecino, que es del este, ha descubierto demasiadas cosas sobre él", ha contado el actor.
"Siempre soy el de afuera"
Daniel Brühl destacó entre risas que le ha costado encajar en grupos por su origen. Su padre es alemán, su madre española y nació en Barcelona. "Ha sido una ventaja crecer en una familia que es una mezcla de todo. Tenemos familia catalana, española, francesa, alemana. De todo. Yo siempre me he sentido muy europeo, pero a veces también me siento muy incómodo porque no soy de ninguna parte", se ha sincerado el actor de Marvel en "El hormiguero".
"Mi versión más relajada está en Colonia, porque allí hablo con mi acento y todos saben que soy de allí. Pero en Barcelona o en Berlín no puedo decir que soy de allí porque siento que no lo soy", comentó. Además dejó en claro que siente que "los alemanes son más cuadriculados y menos emotivos que los españoles".