Atrás parece que empiezan a quedar los días convulsionados que vivió Irene Rosales luego de que saliera a la luz que su enlace matrimonial con Kiko Rivera, con quien celebró su boda en 2016, no se llegara a consumar de manera legal.
Es que fue la propia Irene Rosales quién decidió aparecer en las últimas horas en el aire de “Viva la vida” para aclarar todo y poner fin a las informaciones falsas. “Teníamos que llevar unos papeles para casarnos previamente en el juzgado y hubo un jaleo en los papeles. Le dije a mi marido que siguiéramos con la boda y que más adelante iríamos al registro”, explicó.
Aclarado el malentendido, y en clara muestra de apoyo, sus compañeros de programa le han enviado un ramo de flores de regalo a su casa.
"¿Puedo querer más a mí programa? Detalles que me llenan de alegría. Os quiero compañeros siempre.", respondió Irene Rosales al gesto a través de su cuenta de Instagram.
Aclarado el asunto de la Iglesia
Uno de los interrogantes que se habían desprendido de la polémica boda era del por qué la pareja no había pasado por la Iglesia. Al respecto, Irene Rosales también se refirió: “Nos hubiera gustado casarnos por la Iglesia, pero desde que mi madre falleció nada tiene sentido”, explicó.