Viernes 16 de Febrero 2024
PRINCIPE ANDRÉS

Príncipe Andrés tuvo una humillación sin igual

El mandatario perdió su mejor propiedad.

Príncipe Andrés. Fuente: (Google).
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Escrito en ENTRETENIMIENTO el

El príncipe Andrés continúa siendo el eslabón más débil de la familia real británica, además de haber recibido una serie de denuncias por parte de Virginia Giuffre y estar relacionado con las polémicas alrededor de Jeffrey Epstein, tuvo que vender su casa favorita para evitar la bancarrota.

La familia real, de la que el príncipe Andrés forma parte, tiene toda su riqueza gracias al hecho de que son dueños de la mayor parte de la tierra en las zonas más ricas de Inglaterra. Pero en esta ocasión el hijo de la reina Isabel tuvo que deshacerse de su casa de esquí en Suiza.

El príncipe Andrés, príncipe Carlos y el príncipe William. Fuente: (Google).

Si bien se trata de un problema que la mayoría de la gente querría tener, primero ganar siete millones de euros para adquirir dicha casa frente a los Alpes, la venta del chalé en Verbier por 20 millones de euros significó una humillación para Andrés de York.

El príncipe Andrés tomó mucha deuda para adquirir la casa, lo que terminó siendo su caída, ya que los pagos con intereses por los préstamos que pidió para comprarla son los que tomaron todos sus activos y no pueda pagar sus deudas.

El príncipe Andrés y su madre, la reina Isabel. Fuente: (Google).

¿De dónde saca su dinero el príncipe Andrés?

Otro de los motivos por los que el mandatario de York resalta por encima de su familia es que es uno de los pocos que además de hacer el servicio militar también estuvo en un enfrentamiento bélico, pues se presentó en Malvinas en los años 80, lo que le dejó una pensión de 23 mil euros al año.

El príncipe Andrés llegado de Malvinas. Fuente: (Google).

Además de la pensión del ejército, el príncipe Andrés recibe una especie de mesada por parte de la reina Isabel de más de 290 mil euros por año. Lo cual es más dinero del que se necesita para vivir y mantener una familia, pero no suficiente para comprar casas de esquí en Suiza, algo que tuvo que aprender de mala manera.