Raquel Bollo está pasando un fin de semana de ensueño después de unos días complicados debido al complicado estado de salud de Kiko Rivera. Después de la tormenta, la colaboradora de TV ha encontrado la calma en el bautizo de Jimena, su nieta mayor e hija de Alma Cortés, según informa “Semana”. Ha sido una fecha marcada en el calendario que ha logrado reunir a toda la familia en pos del bienestar de la pequeña.
Desde primera hora de la mañana, Raquel Bollo ya desprendía luz y comenzaba su rutina de belleza para estar perfecta. Si bien su nieta era la gran protagonista del evento, la abuela no podía ser menos en esta ocasión. La ceremonia tuvo lugar por la tarde, donde amigos y familiares acudieron a la Real Parroquia de la Señora Santa Ana de Sevilla con lo mejor que tenían.
Raquel Bollo vivió un día muy especial
Los padres de la pequeña que sería bautizada acudieron al evento, aun estando separados como pareja. Juan José Peña llegó sonriente a la ceremonia. El medio ya nombrado asegura que, aunque ya no está con Alma Cortés, albergan un vínculo cordial para salvaguardar a su hija en común. Manuel Cortés también llegó al evento solo.
Especial momento.
El intérprete contó que le habría encantado vivir ese especial momento junto a Kiko Rivera, pero todavía permanece haciendo reposo después del susto que tuvo hace poco. Raquel Bollo fue con sus parientes a una finca para celebrar el bautizo.
El rostro de felicidad de Raquel Bollo lo decía todo. Era un día muy especial para ella, donde la pequeña era la protagonista y este ha sido un excelente adelanto de lo que seguramente será su cumpleaños.