Charlene de Mónaco sí que se ha llevado todas las miradas desde que regresó a sus actividades oficiales luego de un año ausente por motivos de salud. No hay dudas de que se la echaba de menos, razón por la en cada aparición de la princesa no ha pasado desapercibida, tal y como fue en la inauguración de la Navidad en Mónaco días atrás.
En esta celebración presidida por la sudafricana, estuvo acompañada por sus mellizos, Gabriella y Jacques, y Carlota Casiraghi, hija de Carolina de Mónaco. En ella se dio la bienvenida a los monegascos para visitar la Aldea Navideña durante las fiestas. El gran ausente fue el príncipe Alberto, que, por estas horas, puso rumbo a París sin Charlene de Mónaco.
En efecto, el soberano se trasladó a territorio francés por un motivo particular, como lo develaron fuentes oficiales del Palacio Grimaldi, para participar en eventos a raíz de la conmemoración del centenario de la pérdida del príncipe Alberto I, que fue homenajeado en la capital del vecino país.
Lo sorpresivo fue la ausencia de la que fuera nadadora.
Así las cosas, el esposo de Charlene de Mónaco se distanció por dos días del principado y presenció un evento de tal envergadura, aunque lo sorpresivo fue la ausencia de la que fuera nadadora, que, pese a que venía con una seguidilla de apariciones públicas, luciendo impecable y con un estilo digno de admirar, no acompañó a su pareja.
Un cumpleaños en familia
Por cierto, los hijos de Charlene de Mónaco cumplieron ocho años y pudieron celebrarlo junto a su progenitora, que durante el 2021 no pudo acompañarlos por encontrarse en una clínica en Suiza. En esta oportunidad, la querida princesa vivenció una jornada especial junto a los amores de su vida, ¡vaya felicidad!