Rocío Flores decidió no callarse más y destapar algunos asuntos que encubre su entorno más cercano. En este contexto, realizó una confesión que nadie esperaba que hiciera y que causó gran revuelo.
La iniciativa de Rocío Flores de contar una cuestión familiar devino al verse envuelta en un escándalo a partir de los duros comentarios que hizo Ana María Aldón sobre ella de forma pública. "Me sorprende que no hable de sus temas y hable de mi matrimonio", había apuntado la esposa del diestro.
A la hija de Antonio David Flores no le gustó nada el comentario que hizo la colaboradora de "Viva la vida" y decidió contestar en "El programa de Ana Rosa": "Yo no me he metido en su matrimonio, solo resalté la figura de José Ortega Cano". También señaló que no habló de sus cosas porque su pareja, Manuel Bedmar, "no es un personaje público". Además, la joven sacó a la luz el conflicto que lleva hace años con Ana María Aldón.
Rocío Flores se remontó a cuando estaba en "Supervivientes" y declaró que no obtuvo la ayuda de la mujer del torero en los duros momentos. "Tuve ciertas situaciones en las que consideraba que necesitaba el apoyo de Ana porque formaba parte de mi familia. No lo tuve. Luego, ella dio sus motivos y lo entendí".
"Necesitaba el apoyo de Ana porque formaba parte de mi familia".
Con respecto al mote "Chusa", la 'influencer' aclaró que nunca fue con mala intención. "Es a modo gracioso, no tengo la poca educación para hacerlo de manera despectiva", dijo.
La versión de Ana María Aldón
Al contrario de lo que cuenta Rocío Flores, la esposa de José Ortega Cano indicó en la revista "Lecturas" que en "Supervivientes" habría recibido malos tratos por parte de la nieta de Rocío Jurado y que ese hecho le habría generado problemas de salud.