Muchas veces, los programas de televisión tienen ese momento emotivo que moviliza a la audiencia y a los protagonistas. Es lo que sucedió en la última emisión de "Viva la vida". En este caso, la protagonista fue Raquel Bollo, quien vivió una noche cargada de emociones.
La empresaria abordó, junto a la presentadora del programa, Emma García, la polémica que se generó por sus negocios. En este sentido, Raquel Bollo hizo alusión al tratamiento de la información que se dio en ese momento y la posición que tomaron sus compañeros de "Sálvame".
"Estoy cansada, soy una mujer fuerte, así me considero, y tengo fuerzas, pero las quiero gastar en mi vida de fuera", ha comentado luego de que Emma confesara que Raquel les dijo que "estaba muy a gusto en este programa, pero que se iba".
"Tengo fuerzas, pero las quiero gastar en mi vida de fuera".
"Mejor o peor, pero es mi vida", aclaró Raquel Bollo. La colaboradora también hizo hincapié en cuáles son las prioridades que piensa anteponer al dejar los medios. "En mis proyectos, ilusiones, que me hacen sentir bien", señaló.
Raquel Bollo se mostró superada por la situación y, entre lágrimas, se refirió a la polémica generada en relación con sus negocios. "No tengo más fuerzas para estar justificándome, me alegro por todo el mundo y de los errores de los demás me preocupo, más que alegrarme. Las demostraré donde tengo que demostrar", señaló.
Preocupación por sus padres
Finalmente, la colaboradora remarcó que, otro de los fuertes motivos por el que toma esta decisión tiene que ver con sus padres. "En el fondo me siento culpable por mis padres, pensando en cuándo se van a quedar tranquilos. Prácticamente, cuando llego a mi casa, no me quieren ni preguntar y me duele que sufran", comentó.