Iker Casillas ha tenido el privilegio de pasar el Domingo de Resurrección junto a una buena cantidad de sus amigos en Cádiz. El campeón del mundo pudo reunirse con ellos en las playas de Los Caños de Meca. Buena comida, sol y una mesa repleta de seres queridos fue parte del perfecto fin de semana para el portero.
A través de su cuenta oficial de Instagram, Iker Casillas compartió algunas de las imágenes de la enorme felicidad que lo embargó a lo largo de la Semana Santa. Una de las primeras fotografías tenía que ver con una instantánea de él mismo posando en la playa. En las demás se sacó el protagonismo para entregárselo a sus amigos y al lugar que los cobijó.
Por un momento, en las fotografías que posteó en las historias de su espacio en la red social de la camarita, no había un campeón del mundo que hizo feliz a millones de personas debajo de tres postes, sino un hombre más disfrutando de la compañía de sus amigos. Esto delata lo que ya era un secreto a voces: Iker Casillas tiene una humildad única.
Un hombre más disfrutando de la compañía de sus amigos.
Para alegría de Iker Casillas, el clima de sus días en Cádiz lo acompañaron de la mejor manera posible. En la descripción de su posteo, la leyenda del Real Madrid se alegró de que la Semana Santa vuelva a ser lo que era después de la pandemia, y a su vez, admitió que deberá ponerse en forma después de subir varios kilos en estos días.
Un enamorado de su tierra
“Ríete. Disfruta hoy. Maravilla de lugar, maravilla de país”, escribió Iker Casillas en una de sus primeras publicaciones de la Semana Santa. Sus más de 17,6 millones de seguidores en Instagram se dejaron ver muy contentos de poder ver al futbolista aprovechar de tal manera su retiro.