Rocío Carrasco y Mitele Plus emitieron el décimo episodio de "En el nombre de Rocío", la docuserie en la que la hija de Rocío Jurado devela cuestiones que han afectado a la intérprete y con las que ella ha quedado completamente devastada. Así, la esposa de Fidel Albiac no ha dudado en compartir con los espectadores momentos relevantes de la vida de su progenitora.
Sin dudas, Rocío Carrasco no la pasa nada bien cuando dialoga sobre las situaciones que atravesó Rocío Jurado. En esta oportunidad, el capítulo se centró en las voluntades de la cantante, donde suenan los nombres de José Ortega Cano, Gloria y Amador Mohedano y lo que recibieron de la artista. Así las cosas, la ex de Antonio David Flores comentó que sus familiares no estuvieron conformes con el testamento realizado por Rocío Jurado.
José Ortega Cano obtuvo una propiedad, mientras que Amador Mohedano se hizo con una nave industrial y la finca Los Naranjos, que compartía con Gloria, quien además recibió la casa Mi abuela Rocío. En tanto que la casa de La Moraleja debía venderse y repartirse entre sus tres hijos: dos partes para Rocío, otra para Gloria Camila y otra para José Fernando. Por cierto, la madre de Rocío Flores adquirió las alhajas, los vestidos y los derechos de los trabajos artísticos, además de apartamentos en Miami y una finca llamada El Administrador.
"Si por ellos hubiese sido, yo no hubiese recibido nada de mi madre".
No obstante, Rocío Carrasco manifestó: "No están satisfechos con las valoraciones. Si por ellos hubiese sido, yo no hubiese recibido nada de mi madre. No soportan que me nombre heredera universal. Gloria no lo puede soportar". Con estas palabras, deja más que claro que no estuvieron de acuerdo con la repartición de los bienes.
También hubo hipotecas
Por cierto, Rocío Carrasco develó que debió hacerse cargo de ciertas deudas que poseía su Rocío Jurado. "Yo, que soy la heredera universal, tengo que hacerme cargo de todas las deudas de la herencia. Eso es por ley y yo me hago cargo", expresó la esposa de Fidel Albiac.