Rocío Carrasco ha vuelto a llevarse todas las miradas gracias al nuevo episodio de "En el nombre de Rocío", emitido este lunes por Telecinco. Para sorpresa del público, la esposa de Fidel Albiac se quebró al hablar sobre lo que realmente sintió cuando sus hermanos, Gloria Camila y José Fernando, fueron adoptados por Rocío Jurado y José Ortega Cano.
"Se me caía la baba por ellos", informó una muy emocionada Rocío Carrasco. El quinto capítulo de su docuserie la muestra como no la hemos visto nunca. Sin temor a derramar lágrimas, recordó el día en que Gloria y José arribaron al hogar que por ese entonces aún compartía con "la más grande".
"De pequeños eran bellos y llegaron con una alegría. Para ellos todo eso era nuevo", remarcó la exesposa de Antonio David Flores, sorprendiendo a más de uno por el cálido modo en que se refirió, sobre todo a Gloria Camila, con quien tiene un tenso lazo desde hace muchos años.
"Para ellos todo eso era nuevo".
Acto seguido, Rocío Carrasco confesó que, debido a la diferencia de edad, veía a Gloria y José Fernando más como hijos que como hermanos. Asimismo, recordó el amor que Rocío Jurado tenía por los niños, así como por sus nietos, Rocío y David Flores. "Yo me ponía a verla cómo se quedaba con ellos cuando se ponían películas, cuando jugaban en el jardín. Yo, de una forma sana, pensaba que me hubiese gustado que eso pasara conmigo".
Recordemos que "la más grande", cuando Rociito aún era pequeña, no paraba de trabajar. Giras locales e internacionales, eventos sociales y demás presentaciones. La agenda de Jurado no le permitía pasar demasiado tiempo con su primogénita. Pese a ello, la estrella de Telecinco no guarda rencores. Más bien, lo contrario.
Por otro lado, Rocío Carrasco desempolvó gratos recuerdos vividos por sus dos hermanos y sus dos hijos con Fidel Albiac. A juzgar por sus palabras, los niños adoraban al empresario. El sentimiento era mutuo: "Estaba loco con los cuatro", declaró no sin antes asegurar que la inteligencia y magnetismo de los pequeños fascinaba a Albiac.
La llegada más aguardada
En otro tramo de su docuserie, Rociito admitió que Gloria Camila y José Fernando, antes de llegar a la vida de su madre y de Ortega Cano en 1999, tuvieron una vida difícil en Colombia. Afortunadamente, los niños, quienes entonces tenían tres y seis años respectivamente, lograron adaptarse con prisa a su nuevo entorno.