En un episodio histórico marcado por la turbulencia del conflicto civil español, surgió una pieza única que aún hoy despierta el interés de coleccionistas y amantes de la numismática. La moneda de 50 céntimos de 1937, acuñada en medio del conflicto, se alza como un testimonio tangible de aquellos tiempos convulsos en la historia de España.
En su anverso, esta moneda muestra con orgullo el escudo de armas del Consejo de Santander, Palencia y Burgos, acompañado de la inscripción "Consejo de Santander Palencia y Burgos”. En su reverso, ostenta un valor de 50 céntimos, rodeado de elegantes ramas de laureles. Todos estos detalles contribuyen a su valor en el mercado de la numismática.
Con un modesto diámetro de 19 mm, su fabricación se realizó completamente en aluminio, un material que, incluso en su simplicidad, resalta su singularidad. No hay duda de que se trata de una moneda que todos los coleccionistas quisieran tener entre sus tesoros.
Se trata de una de las monedas de pesetas más valoradas.
El conflicto civil, que dividió al país entre las fuerzas republicanas y franquistas, dejó una huella indeleble en la historia y, de manera similar, en la producción de monedas. Esta moneda fue acuñada con el objetivo de mantener la economía en funcionamiento en medio del conflicto. Hoy, es una de las piezas más destacadas del mundo del coleccionismo.
Valor
Hoy en día, la moneda de 50 céntimos de 1937 se ha convertido en un tesoro para los coleccionistas numismáticos. Su emisión limitada, una consecuencia directa del contexto bélico, la ha convertido en una auténtica rareza. En los mercados numismáticos, su valor se dispara y puede alcanzar los 30 euros o incluso más, dependiendo de su estado de conservación y su historia.