Kiko Rivera ha estado alejado del mundo mediático el último tiempo. Tras haber sido intervenido quirúrgicamente por un problema en el corazón, el hijo de Isabel Pantoja se ha tomado en serio su salud y se concentró en los cuidados. Sin embargo, un nuevo drama familiar lo acechó recientemente.
Kiko Rivera se encuentra en uno de sus mejores momentos a nivel personal y profesional. Con su nuevo tema titulado “El mambo”, el productor musical vuelve a estar en la cúspide del éxito, pero, además, en el ámbito privado, su matrimonio con Irene Rosales parece ir mejor que nunca.
A pesar de ello, el vínculo con su madre escatima de afectos y esto ha empeorado con la última voluntad de la cantante. Isabel Pantoja decidió que nadie asista a su despedida cuando sea el momento, mucho menos sus hijos para que no saquen provecho económico de la situación.
Enterado de estas últimas declaraciones, Kiko Rivera tomó una contundente decisión. “Kiko está encargándose para saber cómo poder renunciar a la herencia. No querría ni la legitima para él, ni que sus hijos hereden las deudas de la abuela”, anunció Marisa Martín Blázquez en “TardeAR”.
"Está encargándose para saber cómo poder renunciar a la herencia".
“La historia es complicada porque tendrían que hacer una gestión delante del notario una vez Isabel falte, y Dios no lo quiera, para renunciar él y sus hijos. Es decir, los hijos de Kiko, en ese momento, tendrían que tener una serie de testigos para confirmar que, efectivamente, no quieren aceptar la herencia”, añadió la periodista sobre la postura de Kiko Rivera.
Sobre su problema de salud
Tras un año de haber sido intervenido quirúrgicamente por un ictus, Kiko Rivera hizo un posteo en sus redes sociales para comentar cómo se encuentra. “Esta vida hace un año me golpeó hasta que casi me la quitó”, comenzó diciendo.
Sin embargo, luego añadió: “Ahora creo desde el corazón que he vuelto nacer, jugué mis cartas y tocó perder. Cargo la culpa, me toca aprender. Hoy el sol brilla y yo lo puedo ver, viejos errores no cometeré. Hoy se cumple un año desde que me dio el ictus. Gracias a la vida por darme esta segunda oportunidad”.