Los sellos postales conmemorativos de España se han convertido en auténticas joyas para los coleccionistas, llegando incluso a alcanzar precios exorbitantes en el mercado. Recientemente, el famoso periódico "El País" ha informado sobre el asombroso valor que algunos de estos sellos se han adquirido a lo largo del tiempo.
Según este medio, uno de los sellos postales más valiosos de la historia postal española es el denominado Inverted Jenny, emitido en 1926 durante la Exposición Iberoamericana de Sevilla. Este sello, que muestra un avión impreso al revés, es tan raro que solo se conocen tres ejemplares en todo el mundo. Uno de estos sellos se vendió por la increíble suma de 880.000 euros en una subasta.
Los sellos postales más valiosos de la historia postal española es el denominado Inverted Jenny.
Otro sello extremadamente valioso es el llamado Cabeza de Ángel, emitido en 1850. Esta estampilla, conocida por su diseño que muestra la efigie de la reina Isabella II, se considera una pieza de gran rareza y es muy codiciada por los coleccionistas. Un sello de este tipo se vendió por la elevada cifra de 620.000 euros.
Estos ejemplares son apenas una muestra de lo lucrativo que puede resultar en la colección de filatelia de sellos postales conmemorativos. A medida que pasa el tiempo, la demanda por estas piezas únicas va en aumento, y es frecuente encontrar subastas y casas especializadas en las que se venden por cifras que superan con creces su valor nominal.
¿Por qué valen mucho?
Ante esta situación, expertos en filatelia instan a los coleccionistas a prestar especial atención a los detalles y rarezas de los sellos postales que adquieren. Un pequeño error de impresión, una cantidad limitada de ejemplares o la relevancia histórica del conjunto pueden llevar a que un sello, en apariencia común, llegue a valer una verdadera fortuna.