Las fresas son una fruta ampliamente apreciadas en todo el mundo debido a su sabor y versatilidad en la cocina. Se trata de un elemento que puede consumirse fresco y puede integrarse en una variedad de preparaciones como postres y batidos. Si bien es una fruta con gran reconocimiento en el rubro culinario, pocos conocen los beneficios que aportan a la salud.
Entre las ventajas que ofrecen, las fresas son conocidas por ser ricas en nutrientes que benefician la salud cardiovascular. Pueden ayudar a reducir la presión arterial, mejorar la función de los vasos sanguíneos y reducir el riesgo de padecimientos del corazón.
El sitio web “Mejor con salud” menciona los beneficios que las fresas aportan a la salud de la piel. Los antioxidantes que contienen pueden contribuir a mantener una piel sana y radiante al reducir los signos del envejecimiento, como las arrugas y las líneas finas. También pueden ayudar a aliviar problemas cutáneos como el acné.
"Pueden ayudar a aliviar problemas cutáneos como el acné".
La vitamina C presente en las fresas es esencial para fortalecer el sistema inmunológico, lo que puede ayudar a prevenir padecimientos crónicos y mejorar la capacidad del cuerpo para combatir infecciones.
Además, la fibra dietética presente en las fresas puede ayudar a estabilizar los niveles de azúcar en sangre al reducir la velocidad a la que los carbohidratos se convierten en glucosa en el cuerpo. Esto puede beneficiar a las personas con diabetes o incluso a aquellas que desean mantener niveles de azúcar en sangre equilibrados.
Un cerebro joven
Entre los múltiples beneficios que aportan las fresas a la salud, el medio citado señala que esta fruta ayuda a optimizar las funciones cerebrales y a optimizar la disminución del riesgo de deterioro cognitivo en los adultos mayores.