Charlene de Mónaco no tuvo una vida sencilla perteneciendo a la realeza, envuelta en cientos de escándalos con el príncipe Alberto. La soberana tomó una decisión importante con sus hijos.
Charlene de Mónaco sabe que en la Casa Grimaldi todos los integrantes de la familia real, incluso los niños, deben cumplir estrictas normas que no tienen en cuenta su edad, sino su rango. Sin embargo, ella hizo algo para que sus hijos no carguen con esas responsabilidades y aprovechen su niñez.
De acuerdo a la revista “Look”, Charlene de Mónaco sabe que no puede ir contra los protocolos de la monarquía, pero sí puede intentar darle mayor libertad a sus hijos. De esa manera, la princesa decidió que los pequeños eligieron sus pasatiempos.
"No quiero obligarlos a entrenar intensamente para un deporte. Tanto el príncipe como yo fuimos atletas olímpicos", expresó la soberana y agregó: "Gabriella tiene amor por el baile hip hop. Jacques practica taekwondo".
"Gabriella tiene amor por el baile hip hop. Jacques practica taekwondo".
El objetivo
Charlene de Mónaco y el príncipe Alberto siempre buscaron el bienestar de sus hijos y el objetivo de ellos es que los niños tengan una vida lo más normal posible, dentro del contexto que les toca vivir con determinadas responsabilidades que exige la corona a su edad.