El ámbito del coleccionismo de monedas está lleno de historias intrigantes y valiosas, y algunos ejemplares españoles han estado en el centro de la atención últimamente, ya sea por su rareza o por errores históricos.
Las monedas de 5 pesetas del año 1975 se han ganado el apodo de la "moneda del error del Mundial". La razón es simple pero sorprendente: el número inscrito dentro de la estrella no es "82", como debería ser, sino "80". Este pequeño error tipográfico ha convertido esta moneda en un objeto de deseo para los coleccionistas. Recientemente,un ejemplar de esta moneda se subastó por 75 euros.
Dentro del catálogo de monedas españolas, las 100 pesetas de Francisco Franco de 1966 ocupan un lugar especial. Estas monedas son únicas en el ámbito del colecconismo español de monedas porque son las únicas acuñadas en plata.
Según la prestigiosa casa numismática La Dobla, las variantes con "palo recto" de esta moneda pueden alcanzar precios de hasta 400 euros.
Estas son las pesetas más demandadas por los coleccionistas.
20 pesetas de Alfonso XIII de 1961
Las monedas a menudo se reinventan a lo largo de la historia, y un ejemplo fascinante es la moneda de 20 pesetas de Alfonso XIII de 1961. Esta moneda es una reedición de la moneda de 20 pesetas del año 1887, utilizando los cuños originales de la época. Para distinguirla de la original, se optó por modificar los ensayadores. En una reciente subasta organizada por la casa Aureo & Calicó, se estimó que esta moneda tenía un valor de 500 euros.