Las monedas de pesetas, una parte importante de la historia numismática española, están ganando popularidad entre los coleccionistas en todo el mundo.
En particular, hay tres monedas que han alcanzado precios astronómicos debido a su rareza y demanda. Estas monedas, que originalmente tenían un valor nominal insignificante, ahora se están vendiendo por cifras que podrían alcanzar una fortuna.
El primer grupo de monedas de pesetas es la pieza acuñada en 1947 ha alcanzado un valor de más de 10.000 euros en subastas recientes, según información de "El País". Esta pieza en particular es muy rara, ya que solo se acuñaron unas pocas como modelos para pruebas técnicas antes de su producción en masa.
De acuerdo con un informe emitido por el diario, otra moneda que ha despertado el interés de los coleccionistas es una peseta de Franco acuñada en 1953. Esta pieza de valor para la numismática es especialmente buscada por su diseño único y se ha vendido por más de 5.000 euros en diversas subastas.
Esta pieza de valor para la numismática es especialmente buscada por su diseño único.
Piezas valiosas
Según el medio citado, se ha encontrado una pequeña cantidad de monedas de pesetas acuñadas en 1966 que contienen un error en su diseño. Estas monedas, que deberían tener una marca de ceca en el reverso, se acuñaron sin esta inscripción por error. Esto las convierte en una rareza altamente valorada y se han vendido en subastas por más de 8.000 euros.