Carlota Corredera, una figura conocida en la televisión española, ha compartido sus pensamientos sobre el documental de Rocío Carrasco, que sacudió los cimientos de la prensa del corazón y generó una controversia que aún resuena en la sociedad. En una conversación reveladora, Corredera también abordó el papel de Irene Montero, la Ministra de Igualdad, en este controvertido episodio.
El documental "Contar la Verdad para Seguir Viva" se presentó como una oportunidad para que Rocío Carrasco desentrañara lo que afirmaba ser una mentira sostenida por los medios de comunicación del corazón durante años. Carrasco, hija de la legendaria Rocío Jurado, hizo una impactante revelación: afirmó públicamente que había pasado por momentos complejos con su expareja, Antonio David Flores, padre de sus hijos. En este sentido, Carlota Corredera decidió opinar al respecto.
Sin embargo, lo que hizo que esta historia fuera aún más impactante fue su acusación a su propia hija, lo que la sometió a un seguimiento implacable por parte de los seguidores de su madre.
En medio de estos reveladores episodios, el programa recibió una llamada en vivo de Irene Montero, Ministra de Igualdad, quien expresó su apoyo tanto a Carrasco como al documental en sí. Este respaldo llevó al despido de Antonio David Flores de su trabajo, aunque, posteriormente, una demanda logró que se considerara nulo.
La postura continua con Rocíito.
Uno de los cambios más notables fue la transformación de la programación de Telecinco, con el cierre del popular programa "Sálvame". A pesar de todas estas medidas, la cadena no ha logrado recuperar su audiencia, pero la nueva dirección mantiene la esperanza de que, con paciencia y fe, los espectadores volverán a elegirlos con el tiempo. En medio de estos cambios, una de las primeras afectadas fue Carlota Corredera.
La acusación
Carlota Corredera fue retirada de la pantalla y, a pesar de varios intentos fallidos de asignarle otros proyectos, no logró recuperar su posición. Ahora, Corredera habla sobre este episodio en su vida, sin arrepentirse de su participación, incluso cuando, en un momento de pasión en vivo, insultó a parte de la audiencia que no aceptó el testimonio de Rocío Carrasco y pidió el despido de algunos de sus compañeros de programa.