En el vasto mundo de la numismática, tres monedas aparentemente comunes de 5 pesetas, 25 pesetas y 50 pesetas de la época de Franco han capturado la atención de coleccionistas y entusiastas.
A simple vista, podrían pasar desapercibidas pero, según detalla el portal digital “La Razón”, su verdadero valor reside en un detalle distintivo: en lugar de la típica estrella que adorna las monedas convencionales, estas llevan la inscripción "BA". Esto las hace altamente valoradas en el mercado de la numismática.
Y es que este distintivo singular conecta estas monedas con un evento histórico significativo: la primera exposición internacional iberoamericana de numismática y medallística, celebrada en Barcelona a finales de 1958. Este toque de exclusividad y su conexión con un momento crucial en la historia las eleva a un estatus especial entre los coleccionistas.
Estas monedas son altamente codiciadas en el mercado numismático.
A pesar de que estas monedas comparten el diseño general de las versiones normales de 5, 25 y 50 pesetas de Franco, es su historia única lo que las convierte en piezas altamente valoradas en el mundo del coleccionismo.
Difícil de encontrar
A pesar de que algunas de estas raras piezas llegaron a circular, y es posible encontrarlas en sacos que han sido transmitidos a lo largo de generaciones, no son fáciles de hallar así nomás. Por eso, muchos coleccionistas están a la caza de estos ejemplares. Si consigues uno de ellos en casa, tu vida puede cambiar de un momento a otro por la asombrosa cifra que podrían pagarte por una moneda de estas.