Los suplementos de colágeno, disponibles en diversas presentaciones que van desde batidos hasta pequeñas pastillas, ampollas y sobres solubles, han suscitado un acalorado debate entre los expertos sobre su capacidad para combatir el envejecimiento de la piel.
Sin embargo, la falta de evidencia científica concluyente ha llevado a opiniones encontradas en el mundo de la dermatología y la nutrición. Francisco Pita, miembro del Área de Nutrición de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición, destaca que, desde una perspectiva de salud, el consumo de estos suplementos no es necesario para individuos sanos. Pero el colágeno es más complejo y lo explica con claridad.
Explica que el colágeno constituye más del 25% de todas las proteínas del cuerpo y desempeña un papel crucial en la estructura de tejidos como la piel, tendones, cartílagos y huesos. Sin embargo, Pita sostiene que una dieta equilibrada proporciona al organismo los nutrientes esenciales para sintetizar estas proteínas estructurales.
El principal punto de discusión en torno a los suplementos de colágeno se centra en su absorción por el cuerpo. Pedro Herranz, jefe del servicio de Dermatología del Hospital La Paz en Madrid, plantea que la efectividad de estos suplementos es motivo de debate tanto en la comunidad científica como en el ámbito comercial.
Una opción que trae tela para cortar.
Herranz señala que, aunque existen algunos estudios que respaldan los beneficios de los suplementos, la metodología de muchos de estos estudios es cuestionable y, en ocasiones, influida por intereses comerciales. Como resultado, persisten serias dudas sobre la efectividad de los suplementos.
El resumen
El uso de suplementos como arma antienvejecimiento es un tema polémico, con opiniones divididas entre expertos. Mientras algunos defienden sus beneficios, otros cuestionan la evidencia disponible y sugieren que una alimentación equilibrada y rica en antioxidantes es suficiente para mantener la salud de la piel y combatir los efectos del envejecimiento.