Actualmente en Sanxenxo para participar en regatas, el rey emérito Juan Carlos no esperaba verse envuelto nuevamente en controversias mediáticas durante su visita a España. El último testimonio de Bárbara Rey y de lo que expuso su hijo, Ángel Cristo Jr, han vuelto a ponerlo en el centro de la atención de forma inevitable.
El hijo de Bárbara Rey reveló que su madre puso contra las cuerdas al rey emérito Juan Carlos, quien realizaba pagos periódicos como resultado de esta presunta advertencia que pasa a términos más graves.
Según Cristo Jr, su madre le encomendó la tarea de capturar fotografías comprometedoras del rey emérito Juan Carlos con el objetivo de utilizarlas como medio de actitudes coercitivas para obtener beneficios financieros. Se afirmó que las sumas de dinero eran entregadas en efectivo y guardadas en el dormitorio de la artista.
En medio de estas revelaciones, surge la interrogante sobre la reacción del propio rey emérito Juan Carlos. Al ser abordado por la prensa el sábado por la mañana, el exmonarca optó por el silencio, limitándose a mostrar una sonrisa a los reporteros presentes. Su comportamiento se alinea con su habitual salida de la residencia de su amigo Pedro Campos con su ventanilla baja, sólo con saludos a la prensa.
Un inédito hecho cambia todo.
Las respuestas a preguntas como si ha tenido conocimiento de las declaraciones del hijo de Bárbara Rey o si las acusaciones son reales no quedaron con respuesta. El revuelvo generado añade un nuevo capítulo a la historia.
La estadía
El emérito parece que permanecerá hasta la Navidad en Sanxenxo y luego regresará a Abu Dabi, donde está su nuevo hogar desde hace varios años, justamente para esquivar a las polémicas.