Las monedas antiguas están viviendo un renacimiento en popularidad, y no es para menos. Estas piezas históricas pueden transformarse en auténticas fortunas para aquellos coleccionistas afortunados que cumplen con el requisito principal: mantenerlas en óptimas condiciones.
Entre las monedas consideradas joyas numismáticas que están llamando la atención se encuentra una moneda de oro de gran tamaño conocida como el "100 Escudos". Su nombre no es casualidad, ya que su valor está intrínsecamente vinculado a su composición.
La misma contiene una impresionante cantidad de oro, aproximadamente 339 gramos. Estas piezas, conocidas como "centenes", fueron acuñadas durante los reinados de Felipe III y Felipe IV en el siglo XVII. Un hito que marcó a los coleccionistas fue su venta en una subasta en el año 2009, alcanzando la cifra de 1 millón de euros. En la actualidad, su valor ha incrementado significativamente y se estima que podría alcanzar los 2 millones de euros.
La segunda posición en esta lista de tesoros numismáticos la ocupan las "excelentes", monedas de oro españolas acuñadas durante el reinado de los Reyes Católicos. Posteriormente, estas preciosas piezas fueron reemplazadas por los famosos escudos a partir del año 1535 y han ingresado entre las más destacadas del mundo del coleccionismo.
Se trata de dos de las monedas más caras de la numismática española.
Asombroso valor
Las monedas de oro de ostentación de los Reyes Católicos son objeto de deseo para los coleccionistas y pueden alcanzar precios sorprendentes en subastas. En particular, las monedas en estado de conservación "EBC" (excelente bien conservada) pueden llegar a cotizarse en el mercado por la asombrosa suma de 600.000 euros.