De acuerdo con un artículo publicado por el diario "ABC", las monedas de céntimos antiguas de España se han convertido en objetos de gran valor monetario en el mercado. Estas pequeñas piezas, que en su momento tenían un valor de céntimos, llevan consigo una historia enriquecedora y hoy en día se han convertido en una fortuna para sus poseedores.
Según el artículo, algunas de estas monedas de céntimos antiguas alcanzan precios elevados debido a su rareza y demanda. Una de las piezas más codiciadas es la moneda de céntimo de 1870, conocida popularmente como la "de la flor".
Esta moneda, diseñada por Bartolomé Maura Montaner, se ha llegado a vender por más de 10.000 euros en subastas especializadas. Otro ejemplo destacado es el centavo de 1906 con estrella, que puede valer hasta 4.000 euros.
Esta moneda, diseñada por Bartolomé Maura Montaner, se ha llegado a vender por más de 10.000 euros.
La razón detrás de estos altos precios reside en la escasez de estas monedas. Muchas de ellas fueron retiradas de la circulación y han sido adquiridas por coleccionistas e inversores a lo largo de los años. Además, la conservación de estas piezas también juega un papel importante en su valor. Cuanto mejor sea su estado de conservación, más alto será el precio en el mercado de la numismática que se pueda obtener por ellas.
Un negocio que crece
Esta tendencia ha llevado a un auge en el coleccionismo de monedas antiguas en España, con ferias y eventos dedicados a estos objetos de valor. Se espera que la demanda continúe creciendo en los próximos años, lo que podría incrementar aún más los precios de estas monedas.