Manuel Díaz "el Cordobés" y Virginia Troconis no dejan de gritar a los cuatro vientos lo mucho que se adoran. Llevan juntos 22 años, tienen dos hijos en común, Manuel y Triana, y conforman uno de los matrimonios más queridos y populares de la escena mediática nacional. Pese a ello, la fama jamás se les ha ido a la cabeza.
El aclamado Manuel Díaz "el Cordobés", en más de una ocasión, ha sugerido que la atención pública es de doble filo. Su recordado matrimonio noventoso con Vicky Martín Berrocal, por cierto, terminó desgastándose debido al constante asedio de la prensa. Ambos eran muy jóvenes y la presión fue demasiada: en octubre de 2002, dos años después del nacimiento de su hija Alba, decidieron tomar caminos separados.
Así las cosas, el diestro sabe perfectamente las glorias y oscuridades de ser una celebridad. Tal vez sea por sus sombras que decidió ya hace un buen tiempo instalarse en una lujosa y alejada finca en Guillena, Sevilla, con su familia. Proteger la privacidad de los suyos, al parecer, es fundamental para el hijo de Manuel Benítez.
Troconis, en una conversación con "Deia", también se refirió a la fama y aseguró que no le afecta en lo más mínimo. "He conseguido paz, tranquilidad y estabilidad, así que creo que la fama me afecta menos de lo que pueda parecer desde fuera", declaró antes de afirmar que ni ella ni Manuel Díaz "el Cordobés" suelen ser criticados en la esfera social, por lo que se siente plenamente afortunada.
"He conseguido paz, tranquilidad y estabilidad".
"No me gustan las polémicas y no tengo nada en contra de nadie. La vida ya es muy complicada, ¿por qué nos la vamos a complicar más?", reflexionó y, acto seguido, dejó claro que su atención está puesta al cien por cien en el cuidado de su marido, de sus hijos, de su casa y trabajo. Sumado a esto, la modelo venezolana se refirió a la fama del diestro, a quien conoció cuando ella tenía tan solo 22 años.
No se arrepiente
Admitió que, al inicio del vínculo, no le resultó para nada sencillo lidiar con la popularidad de Manuel Díaz "el Cordobés", quien se había divorciado recientemente de la madre de su primogénita. "Fácil, fácil, no era", admitió antes de celebrar el hecho de haber conseguido llevarse de diez tanto con la ex de su marido como con su hija. Así las cosas, juntos han logrado conformar una original familia ensamblada en la que prima la privacidad, el respeto y el amor.