En el universo coleccionable, los sellos postales no son solo pequeños trozos de papel pegados a cartas; son auténticas joyas que encapsulan historias, errores y momentos trascendentales. Adentrémonos en el apasionante mundo del coleccionismo de sellos, donde cada pieza es un tesoro esperando ser descubierto.
Uno de los sellos postales más icónicos es el "Todo el país es rojo" de 1968, un testimonio visual de la revolución política liderada por Mao Tse Tung y el comunismo en China. Este sello no solo captura la esencia del movimiento, sino que también refuerza su mensaje con la poderosa imagen de ciudadanos sosteniendo el pequeño libro rojo, símbolo emblemático del comunismo maoísta.
Sin embargo, este sello no escapa de la intriga, ya que contiene un error de diseño al dejar en blanco la isla de Taiwán. Tras su detección, fue retirado del mercado, y aunque se desconoce cuántos ejemplares originales sobreviven, en 2018, uno de estos sellos alcanzó la asombrosa cifra de dos millones de dólares en una subasta entre coleccionistas de China.
Cualquiera de estos dos sellos postales pueden convertirte en millonario.
Pero este no es el único, ya que, en el catálogo de rarezas, destaca el sello de error de Baden de 9 Kreuzer de 1851, considerado el sello más valioso entre los alemanes. Así, estos sellos postales se son unos de los más destacados del mundo del coleccionismo.
Asombroso valor
Con solo cuatro ejemplares conocidos, estos sellos postales tenían la intención de ser impresos en rosa, pero debido a un error, varias hojas salieron en color verde. La placa equivocada para el papel verde resultó en un sello con un 6 en lugar del 9. En 2008, la rareza de este sello alcanzó su máximo esplendor cuando uno de los cuatro ejemplares se vendió por la asombrosa cifra de 1.545.000 dólares.