Tamara Falcó habló en “El hormiguero” acerca de su boda con Íñigo Onieva. Según recoge la revista “Semana”, el enlace iba a tener lugar el 17 de junio, pero los enamorados han tenido que cambiar la fecha debido a los viajes que deben hacer algunos de sus seres queridos. Quieren que todos sus allegados vayan a la fiesta, así que ese anhelo ha podido más. La charla comenzó a raíz de que Pablo Motos se mostró preocupado porque la marquesa de Griñón había cambiado el día.
Pablo Motos advirtió que tiene “una agenda muy ocupada”. Tamara Falcó le garantizó que no tendría ningún problema, ya que la boda se celebraría en julio. “Ya hemos terminado el programa, así que tan ocupada, tan ocupada, no la tienes”, reveló la hija de Isabel Preysler. Su compañero de trabajo no tenía excusa ninguna para no asistir.
“Estrés tremendo”.
Aunque sí pueda asistir, Pablo Motos puede ver cambios en sus planes para el verano. “Lo único que no te vas a poder ir de vacaciones hasta que pase la boda”, matizó Tamara Falcó. Con respecto a los preparativos, la diseñadora aseguró que tiene un “estrés tremendo”.
“Tienes que hacer un montón de cosas y todo el mundo te dice que no tienes tiempo. Pienso que aún quedan cinco meses, pero es verdad que todo el tiempo están saliendo cosas”, expresó.
El especial menú de Pablo Motos en la boda de Tamara Falcó
Tamara Falcó quiso aplicar un poco de humor a la situación y recordó que Pablo Motos tiene un menú especial. “Hoy me tengo que acordar de que tú solo comes pollo”, señaló, dirigiéndole al presentador de Antena 3.