Isabel Pantoja y Kiko Rivera mantienen una enemistad hace tiempo, todo se debe a asuntos de dinero y herencia. En este contexto, madre e hijo han recibido la información que los arruina para siempre.
"Cotilleo" señaló que la única razón que pudo haber unido a Isabel Pantoja con su hijo y que podría haber dado comienzo a la reconciliación era la venta de Cantora, pero un suceso inesperado terminó con todo el sueño de la cantante.
"El programa de Ana Rosa" informó que la artista tiene varios problemas con sus negocios. El primero es el hecho que le sucedió al restaurante de Fuengirola, Cantora Kopas, a manos de unos desconocidos que arruinaron todo. "Esto sucedió en febrero del año pasado, se volvió a arreglar y nuevamente pasó lo mismo", indicó Antonio Rossi en el ciclo de Ana Rosa Quintana.
Además, el 'paparazzi' de Telecinco indicó que la venta de "Cantora", propiedad de Isabel Pantoja y sus hijos, no pudo ser posible. "Hubo un grupo inversor que finalmente optó por la compra con una cantidad superior a los 10 millones de euros", señaló, pero resulta que al investigar el terreno, "la finca se encuentra en una zona ecológica", por lo tanto la decisión depende de la Unión Europea.
"La finca se encuentra en una zona ecológica".
¿Qué hizo la artista?
De acuerdo al medio citado anteriormente, Isabel Pantoja se habría puesto en contacto con la Junta de Andalucía y el Ministerio de Agricultura y Pesca porque quiere detener esa decisión. Además, consideró que no está respetando sus derechos, porque nunca le informaron que su finca se encontraba en una zona ecológica y de cuidado de las especies. Un dato que también impacta a Kiko Rivera.