Joaquín Sánchez y Susana Saborido se han convertido en una pareja muy querida por los internautas, y es que ambos han compartido con los espectadores cuestiones vinculadas a su vida matrimonial, para la cual no todo fue color de rosas, pues atravesaron por momentos muy complicados.
El fútbol es la razón por las que Susana Saborido ha vivenciado situaciones de soledad, de angustia y descontento. Esto a raíz de la carrera profesional de Joaquín Sánchez, pues el centrocampista debía dedicar mucho tiempo al deporte y no podía hacer lo mismo con su familia.
Sin embargo, hay una serie de aspectos sorprendentes que involucran al futbolista del Betis y a su esposa y que seguro se desconocían. En efecto, el matrimonio lleva 17 años de casados, pues celebraron su boda en el 2005. Ellos se conocieron gracias a un amigo en común que los presentó.
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Lo que tanto llama la atención en ellos es lo bien que se llevan y el sentido del humor tan risueño que poseen.
Por cierto, en un primer momento, Joaquín Sánchez no era del agrado de Susana Saborido, de acuerdo con la colaboradora, esto se debía a la reputación que suelen tener los futbolistas. Más tarde, conectaron perfectamente, lo que llevó a que se unieran en un vínculo afectivo. Además, lo que tanto llama la atención en ellos es lo bien que se llevan y el sentido del humor tan risueño que poseen.
Una familia de 'influencers'
Por su parte, Joaquín Sánchez y Susana Saborido tienen dos hijas en común, Daniela y Salma, ambas se suman a las gracias de sus progenitores y realizan 'performance' para TikTok, red en la que han alcanzado popularidad. Sin dudas, una familia que con sus ocurrencias hacen reír a los internautas.