Jesulín de Ubrique y María José Campanario están juntos desde hace 20 años y, a partir de entonces, enfrentan casi a diario toda clase de rumores malintencionados. En conversación con "¡Hola!", la odontóloga admitió que las versiones que la rodean a ella y al torero han sido siempre muy duras. "Supe que tendría que vivir con esos comentarios toda mi vida", lamentó.
Campanario pensó incluso en no seguir al lado de Jesulín de Ubrique debido a las críticas: "Llegué a pensar si me merecía la pena, pero ahí ya estaba muy pillada y muy enamorada". Lo cierto es que, aún ahora que se han distanciado de los focos mediáticos, siguen recibiendo comentarios que los indignan. Algunos de los últimos rumores dicen que la pareja se habría encargado de planaer una intervención estética a su hija Julia o que María José se habría escondido de los fotógrafos al salir del hospital donde dio a luz a su tercer retoño.
Al respecto, explicó: "Para nada. Nos fuimos tranquilamente cuando me dieron el alta. No tengo la necesidad de esconderme. Nunca lo he hecho. Cuando salí del hospital, no había prensa en la puerta. Según me comentaron, se había especulado con que ya habíamos salido antes". Acto seguido, se refirió a la versión que habla de que se llevaría mal con la familia de Jesulín de Ubrique. "Esto se va a decir toda la vida", lanzó con indignación y acotó: "Llevamos veinte años escuchando cosas así. Si tuviéramos que hacer caso. Sinceramente, no es así".
"Según cuentan, hemos tenido millones de crisis".
Acto seguido, rechazó la especulación de que ella habría alejado a su marido de los Janeiro. "Siempre tengo que ser la bruja mala", despotricó ante la ya citada publicación y sumó: "No es verdad. Conocen al niño y todos los fines de semana o cada dos nos juntamos todos". Sumado a estos rumores, María José Campanario debe hacerles frente a aquellos que insisten con sus supuestas crisis con Jesulín de Ubrique. "Según cuentan, hemos tenido millones de crisis", enfatizó.
Un amor que perdura pese a las habladurías
"Es verdad que la cosa estuvo más tirante cuando quise volver a estudiar. A él le chocó mucho. En algún momento dado, hemos tenido puntos diferentes en la toma de alguna decisión, pero nunca hemos estado mal", continuó la profesional de la salud para cerrar del siguiente modo: "Muchos no daban por nosotros ni dos meses. Pero no se funciona por el qué dirán".