Carmen Borrego está pasando por un momento desolador. “Semana” se puso en contacto con su círculo cercano y aseguran que “está atravesando por uno de los momentos más delicados de su vida”. Le ha tocado hacer frente a importantes pruebas de la vida en muy poco tiempo. Trata de sacar fuerza de donde no la hay, ya que debe replantearse varios aspectos. La situación con su hijo y su nuera no le da descanso y las últimas noticias sobre su futuro laboral no son para nada alentadoras.
La cancelación de “Sálvame” dejó desencajada a Carmen Borrego, quien no esperaba para nada perder su ingreso. Es consciente de que el mes que viene se quedará sin trabajo y su futuro es incierto.
Esta realidad se torna más cruda a sus 56 años, una edad en la que las contrataciones son más difíciles de conseguir. Sus amigos están preocupados por ella y así lo han manifestado. A todos estos frentes, hay que añadir uno que la lleva preocupando desde hace tiempo: su madre.
La salud de María Teresa Campos tampoco está en el mejor momento y Carmen Borrego está distanciada de su hermana Terelu. Su hijo está a punto de ser padre en un vínculo tirante con ella.
Mucha información.
Es mucha información para una ola persona y parece inevitable que le afecte a su estado anímico. Haberse quedado sin trabajo de la noche a la mañana y enterarse por la prensa ha sido lo último que necesitaba para terminar de tocar fondo.
Carmen Borrego no puede más
La única vía de escape que tenía Carmen Borrego para escapar de los problemas era “Sálvame”, un programa que tiene fecha de caducidad.
Tras la emisión del último episodio, tendrá que replantearse qué hacer y puede que mientras tanto su cabeza no pueda alejarse tanto como quisiera de sus asuntos personales. En este pozo sin fondo, la mediática encuentra alivio en una sola persona, José Carlos Bernal, su segundo marido.