Carlota Corredera lleva ya más de un año fuera de “Sálvame”. Intentó regresar a Telecinco con un nuevo proyecto, pero no tuvo éxito. El tiempo pasa y la presentadora debe buscar nuevas fuentes de ingreso mientras espere a que salga algo en TV. Según registra “Semana”, tras el fracaso de “¿Quién es mi padre?”, la mediática probó suerte como profesora, entrando a la plantilla del curso de Presentador de TV y Reporterismo en una escuela de comunicación.
No obstante, Carlota Corredera está acostumbrada a un flujo de ingresos grande y todo lo que pueda sumar ayuda. La conductora es activa en redes sociales, pero ahora lo está siendo todavía más. Con 470.000 seguidores en Instagram, y habiendo pasado por Telecinco, Carlota tiene todas las papeletas para ser una gran ‘influencer’, una faceta que ya ha comenzado a explotar.
Sus seguidores deben estar contentos de tenerla más dedicada a su perfil, ya que aparece a menudo para dejar datos interesantes sobre hoteles para visitar, colchones cómodos y hasta productos para la menopausia. Además, tiene un 'podcast' llamado “Menudo trajín”, donde habla de temas de actualidad. No contenta solo con estas vertientes, la amiga de Rocío Carrasco se ha animado a vender su ropa por internet.
En lugar de dejarla tomando suciedad en el armario, Carlota Corredera opta por venderla y ayudar con ese dinero a las mujeres que padecen un trato inapropiado en el hogar. Con estos cuatro frentes abiertos, puede que la figura esté mitigando un poco su salida de televisión y llenando su alma, sabiendo que uno de esos proyectos ayuda a una causa tan noble.
Carlota Corredera vende 86 piezas de ropa
Carlota Corredera tiene 86 piezas a la venta en internet. La presentadora siempre va elegante a cada evento y aparición pública que tiene. Tenga o no proyecto, sigue siendo un rostro televisivo que no puede ir de cualquier manera.
No es la primera famosa que lo hace.
En más de una ocasión ha impactado con sus estilismos, así que, ¿por qué no rentabilizarlos y ayudar a otros? No es la primera famosa que lo hace y puede que, tras el fin de “Sálvame”, tampoco sea la última.