Alaska y Mario Vaquerizo son unos completos aficionados del folclore español. Sienten una gran devoción por Lola Flores. Así quedó demostrado hace un tiempo atrás cuando la cantante posó con una camiseta del museo de Lola Flores que le había regalado un amigo. En una de sus residencias, la artista tiene un espacio dedicado a su ídola, de quien guarda carteles y muñecas en su honor. Este espacio de su domicilio es un auténtico homenaje a la bailaora.
Se podría decir que Alaska y Mario Vaquerizo tienen un museo de detalles dedicado a “la Faraona”. Lejos de avergonzarse o querer guardarlo solo para ellos, hacen eco de él en sus redes sociales, donde hacen partícipes a sus fans. El humorista incluso se transformó en Lola Flores en una de las galas de “Tu cara me suena”, demostrando una actuación impecable y un conocimiento de la figura sensacional.
Fuente: (YouTube/ Canalsur).
En el “altar” que Alaska y Mario Vaquerizo tienen para Lola Flores podemos ver muñecas, réplicas de la artista, cuadros, discos y un largo etcétera.
Rincón plagado de color, alegría y arte.
Incluso han adquirido cuadros pintados por ella y fotos antiguas de coleccionistas para incluir en su santuario. Este es un rincón plagado de color, alegría y arte, donde escapar del mundo exterior y concentrarse en el legado que dejó una de las artistas más grandes de nuestro país.
Alaska y Mario Vaquerizo: unidos por lo más profundo
Es de público conocimiento que Alaska y Mario Vaquerizo se aman por encima de todas las cosas, pero con este rincón dedicado a una persona que ambos admiran demuestran que su vínculo va todavía más allá. Están unidos por lo más profundo de su interior, que es la vocación de ser artistas.