Las monedas antiguas o de conmemoración pueden significar altos ingresos para aquellos que las tengan. No siempre es sencillo dar con ejemplares de este tipo, sin embargo, nunca ha de perderse la fe. Los coleccionistas siempre quieren dar con nuevas piezas y, así las cosas, resulta imprescindible revisar nuestros hogares para confirmar si, en efecto, guardamos sin saber alguna joyita para la numismática.
Una de las monedas que podría cambiarle la suerte a cualquiera son las 100 pesetas de 1870. Una gema, sin duda, que tantos buscan y que pocos han encontrado. Es que, tal y como reseña "El Cronista", solo se han dado con 12 ejemplares en todo el mundo. Seis de ellos pertenecen a colecciones privadas y el resto se encuentran en la Fábrica de Moneda y Timbre de España.
Lo cierto es que la última venta de estas monedas se llevó a cabo por el friolero monto de 150.000 euros. La publicación indica, por cierto, que este año esperan vender otra de estas piezas por casi 300.000 euros. Lo cierto es que existen otras monedas algo más accesibles. Tal es el caso de la moneda de España 1999.
Se trata de una peseta de 20 céntimos en la que figura el rostro de Miguel de Cervantes. Su particular peso en metal la hace una que interesa, y mucho, a coleccionistas. Por esta, se puede llegar a pagar hasta 1.800 euros, siendo su valor mínimo el de 200 euros. Otras de las monedas de interés son las conmemorativas.
Con la efigie de Grace Kelly
En esta ocasión nos referiremos a la moneda de Mónaco 2007. Esta tuvo por función conmemorar a Grace Kelly. Debido a que tan solo se crearon 20.000 ejemplares, su cotización en el mercado aumenta año tras año. En la actualidad, se comenta, podría costar hasta 2.500 euros.