Jueves 15 de Febrero 2024
MONEDAS

Valen una fortuna: las monedas que pueden cambiar tu vida para siempre

¿Lo sabías?

Monedas. Fuente: (Google).
Escrito en ENTRETENIMIENTO el

Coleccionistas de monedas y numismáticos están dispuestos a pagar grandes sumas por piezas únicas y raras. Tres ejemplos recientes demuestran la pasión que rodea a este fascinante 'hobby'.

Las monedas en cuestión, las onzas de Guatemala (1794-1801), los cincuentines de plata del siglo XVII y Carlos V Pretendiente (1852), han capturado la atención de coleccionistas todo el mundo, quienes han estado compitiendo para adquirirlas en subastas especializadas.

Monedas. Fuente: (Google).

Las onzas de Guatemala, acuñadas entre 1794 y 1801, son verdaderas joyas para los coleccionistas. Cada una de estas piezas es única y extremadamente rara, lo que ha llevado a su elevado valor en el mercado. Esto ha generado una gran demanda y ha elevado su valor de mercado. Su valor aproximado se estima en 200.000 euros, aunque en subastas pueden alcanzar precios aún más altos.

Moneda onzas de Guatemala. Fuente: (Google).

Por otro lado, los cincuentines de plata del siglo XVII son monedas antiguas de gran tamaño y un valor nominal de 50 reales. Acuñadas por primera vez en 1609 en la Casa de la Moneda de Segovia durante el reinado de Felipe III, estas monedas se han convertido en auténticos tesoros para el coleccionismo. Su rareza y su antigüedad las hacen muy codiciadas, lo que se refleja en su valor en el mercado, que se estima que su valor se sitúa en torno a los 200.000 euros.

Ambos ejemplares pueden costar hasta 200.000 en subastas 'online'.

Moneda de cincuentines de plata del siglo XVII. Fuente: (Google).

Otro ejemplar un poco menos valioso

Finalmente, las monedas Carlos V Pretendiente, también conocidas como monedas carlistas, tienen una historia y un significado únicos. Acuñadas en 1852 durante el reinado de Carlos Luis de Borbón y Braganza, estas monedas representan un movimiento carlista que buscaba reclamar el trono y tienen un valor aproximado de 5.000 euros, aunque su verdadero valor radica en su importancia histórica y su rareza.