Los datos del Banco de España revelan que hay más de 200.000 millones de pesetas que conservan aún los ciudadanos. Estas, así acumuladas, representan un valor de más de 1.500 millones de euros.
Estas estadísticas reflejan la cantidad de pesetas que están repartidas entre hogares particulares y tiendas de coleccionismo. Y es que la numismática española es la segunda más coleccionada del mundo.
En este sentido, hay algunas monedas que tienen un valor simbólico bastante importante por lo que hace ascender su valor real. Hay algunos ejemplares por los que se paga una buena cantidad, partiendo de los 1.000 euros, y otros por los que no tanto.
Es el caso de la moneda de 20 pesetas que fue acuñada en 1904 y tiene un valor de 2.500 euros, según detalla el sitio “El Economista”. El hecho de que sean históricas las hace más valiosas para los coleccionistas, como es el caso de las 100 pesetas de Alfonso XIII del año 1897 valoradas en 1.000 euros.
El hecho de que sean históricas las hace más valiosas para los coleccionistas.
Un caso más
Las 50 pesetas del dictador Francisco Franco, en tanto, fueron acuñadas en 1957 y es otra de las monedas más valoradas. Sucede que tiene un precio que parte de los 400 euros en las tiendas de subastas.