Cuando la reina Letizia tomó la decisión de unirse al rey Felipe y asumir el compromiso de convertirse en princesa y futura reina, su vida dio un giro de 180 grados. Dejando atrás su exitosa carrera como periodista, se adentró en un mundo donde todo cambiaría radicalmente. Enfrentó tanto desafíos laborales como personales, y descubrió que el camino hacia la realeza implicaba renuncias y adaptaciones en todos los aspectos de su vida.
Sin embargo, a pesar de los cambios, la reina Letizia ha logrado mantener intactos algunos vínculos de amistad. Durante su etapa como periodista, estableció lazos sólidos con personas que han evidenciado ser pilares en su vida. Una de ellas es Sonsoles Ónega, con quien compartió su tiempo en "CNN".
Con el paso de los años, han preservado su amistad, incluso después de que la reina Letizia adquiriera el título de reina. Sonsoles ha sido discreta y nunca ha revelado detalles sobre la vida de Letizia ni ha traicionado la confidencialidad de sus conversaciones o planes compartidos.
Además, la reina Letizia mantiene una amistad de antaño con Almudena Bermejo, quien ha ejercido como directora del Espacio Fundación Telefónica. En diversas ocasiones, han coincidido públicamente en eventos, donde han mantenido un vínculo cordial de acuerdo con las formalidades del protocolo real.
Los años no dejan que la amistad caiga.
La habilidad de Letizia para preservar estas amistades duraderas es un reflejo de su personalidad y su capacidad para equilibrar su rol público con su vida personal. Aunque su papel real implica numerosas restricciones y cambios, ella ha evidenciado que la amistad es un valor fundamental en su vida y ha sabido cultivarla con dedicación en estos los años.
El tiempo no es excusa
A pesar de su posición y el protocolo que la rodea, Letizia ha encontrado la manera de mantener una conexión especial con aquellos que han sido importantes en su vida, tanto en su carrera periodística como en su juventud.