En el mundo de la numismática, hay coleccionistas que están dispuestos a pagar una fortuna por obtener un pedacito de historia. En el caso de España, hay tres monedas en particular que despiertan interés y son piezas codiciadas por los fanáticos de la numismática en todo el mundo.
Según "El Mundo", la primera de estas monedas es la de 100 pesetas emitida en 1983. Caracterizada por su diseño con un arma grabada en el anverso, esta moneda se ha convertido en un objeto de deseo para los coleccionistas debido a su rareza y a su simbolismo histórico. Según expertos en la materia, se estima que su valor actual ronda los 10.000 euros.
La primera de estas monedas es la de 100 pesetas emitida en 1983.
Las segunda monedas que hace que los coleccionistas abran sus billeteras es el Rey, unas monedas de una peseta acuñada en 1870 durante el reinado de Amadeo I de Saboya.
Esta moneda se caracteriza por tener un perfil del monarca grabado en el anverso. Dada su antigüedad y escasez, es considerada una auténtica joya en el mundo de la numismática. Su valor en el mercado alcanza los 15.000 euros.
En tercer lugar
Por último, pero no menos importante, encontramos las Rubias, unas monedas de 25 pesetas emitidas en 1990. Esta moneda destaca por su diseño con la imagen de una mujer de cabello rubio en el reverso. Se desconoce la razón exacta, pero esta moneda se ha vuelto extremadamente buscada por los coleccionistas y se estima que su valor puede llegar a los 20.000 euros.