El ‘mindfulness’ es una práctica que tienen como objetivo adquirir la atención plena del individuo. Alcanza la relajación más extrema, al mismo tiempo que mejora su capacidad de concentración, atención, reducción del estrés y la ansiedad, entre otras cosas. Mediante determinadas técnicas, logra un profundo estado de conciencia de las emociones. La idea principal es separar al ser humano de sus pensamientos para poder reconocerlos y poner en duda los patrones mentales que lleva consigo.
La persona que practica ‘mindfulness’ logra enfocarse en el “aquí” y “ahora”, obteniendo una atención total de lo que está sucediendo en su momento presente. Un artículo de la revista “Psicología y mente” asegura que esta práctica trae importantes beneficios psicológicos para los individuos. De hecho, esta no es una práctica nueva, sino todo lo contrario. Encontramos sus orígenes a finales del siglo VII a.C, cuando apareció el budismo.
Beneficios de practicar ‘mindfulness’
Ayuda a controlar el estrés y la ansiedad. Un agitado estilo de vida o una rutina insatisfecha puede derivar en cuadros de ansiedad o depresión. Practicar meditación y ‘mindfulness’ baja los niveles de cortisol, la hormona que se activa ante situaciones de estrés.
Termina con los problemas de insomnio. El ‘mindfulness’ puede ayudarte a descansar mejor por la noche. Asimismo, durante el día se tendrá más control sobre las emociones y el comportamiento propio.
Es una protección para el cerebro.
Es una protección para el cerebro. Un estudio de la Universidad de Harvard y el Hospital General de Massachussets reveló que meditar aumenta el tamaño de los telómeros, unas estructuras ubicadas en los extremos de los cromosomas. Están vinculadas con el envejecimiento y la aparición de ciertas patologías emergentes en la vejez.
Otras ventajas que derivan de estar presente en tiempo y espacio son una mayor concentración, desarrollo de inteligencia emocional, mejora de vínculos interpersonales, mayor creatividad y mejora de la memoria.