En un mundo de las antigüedades muy apreciado, tres extraordinarias reliquias europeas emergen con un valor exorbitante. Estas piezas únicas no solo cuentan una historia fascinante, sino que también podrían hacer quebrar la alcancía de cualquier colección.
Una de las antigüedades que menciona "El Mundo" es la Corona Imperial del Sacro Imperio Romano Germánico, que data del siglo X y se encuentra en Alemania, con más de mil gemas preciosas incrustadas, es una reliquia sagrada y uno de los tesoros más celebrados de la historia. El precio estimado de esta antigüedad se sitúa en alrededor de 10 millones de euros.
El precio estimado de esta antigüedad se sitúa en alrededor de 10 millones de euros.
Otras de las antigüedades de gran valor es "Stradivarius Medici", es sin lugar a dudas el violín más codiciado del mundo. Fabricado en 1716 por el legendario 'luthier' italiano Antonio Stradivari, este instrumento ha sido denominado como el Santo Grial de los violines. De acuerdo con el medio citado, el precio de venta de este excepcional violín fue de 3,6 millones de libras esterlinas, aunque actualmente su valor se estima en más de nueve millones de euros. Es considerada una de las antigüedades más buscadas.
La siguiente joya es "El Libro de Kells", un manuscrito del siglo IX considerado la más hermosa obra insular medieval del arte del libro. Conservado en la Biblioteca del Trinity College en Dublín, Irlanda, este tesoro celta contiene los cuatro Evangelios del Nuevo Testamento y es una muestra de destreza artística y devoción religiosa. Según la página web de la biblioteca, no hay un precio exacto para este manuscrito, pero el valor estimado estaría en torno a los 100 millones de euros. ¡Un tesoro de incalculable valor!
Unas piezas que todo coleccionista sueña
Estas tres antigüedades europeas son verdaderos tesoros del pasado que podrían cambiar la vida de cualquier afortunado comprador. Con precios que oscilan entre los millones y los cientos de millones de euros, su adquisición no solo es una inversión financiera, sino también una manera de preservar la historia y el legado cultural de Europa.