El discurso de Fernando Alonso ha cambiado en estos días durante su tiempo en Aston Martin. El piloto dos veces campeón del mundo terminó en novena posición en Hungría este fin de semana y ha terminado de admitir que algo anda mal en el equipo.
“No fuimos lo suficientemente rápidos para pelear con los que estaban delante y no teníamos amenazas detrás. Tres puntos, noveno y décimo (por Lance Stroll), veremos el fin de semana próximo. Fue similar, en las dos carreras últimas hemos padecido”, destacó un preocupado Fernando Alonso.
“En Silverstone, el coche de seguridad nos ayudó para acabar séptimos, que era mejor que nuestro ritmo. Ahora el noveno es nuestro ritmo. Detrás de Red Bull, Mercedes, Ferrari y McLaren, que es más o menos lo que hemos visto tanto en clasificación como en carrera”, aseveró el asturiano.
“En Silverstone esperábamos padecer un poco, pero en Budapest esperábamos ser más fuertes. No fue el caso, tendremos que analizar para ser más fuertes en Spa”, remarcó Fernando Alonso, ya pensando en el siguiente GP de Bélgica que se llevará a cabo este próximo fin de semana.
"No fue el caso”.
Trabajo por hacer
“Tenemos que ver muchas cosas, depende de nosotros entender qué hace el coche en comparación con el inicio de la temporada, cuántas mejoras hemos traído en comparación con nuestros rivales, y también entender los neumáticos mejor. Tenemos que hacer un mejor trabajo”, afirmó Fernando Alonso.