Aunque la selección nacional ya contaba con reconocimiento internacional, la entrada de un deportista olímpico en la familia real impulsó la visibilidad del deporte. Ahora, es Pablo Urdangarin, hijo mediático de la pareja, quien lleva adelante su legado y se perfila como una personalidad destacada de la tercera generación Borbón. La boda de Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina en 1997 tuvo un impacto inesperado en el mundo del balonmano español.
Mientras que sus primos, los hijos de la infanta Elena, Victoria Federica y Felipe Juan Froilán, han captado la atención de los medios por su estilo audaz y su vida nocturna, los hermanos Urdangarin, hijos de la infanta Cristina, parecían preferir un perfil más discreto. Sin embargo, Pablo está emergiendo como una persona prominente que superará en fama a sus primos. Pablo Urdangarin se presenta como una estrella en potencia dentro de la familia real española.
Sin embargo, Pablo Urdangarin ha dado cuenta de una disposición diferente al conceder entrevistas y compartir su perspectiva con los periodistas. A diferencia de sus hermanos, ha resistido valientemente la persecución mediática, lo que indica una sorprendente madurez y una habilidad innata para lidiar con la atención pública.
Hasta ahora, los hermanos Urdangarin se habían mantenido en silencio para proteger a su familia de las adversidades que han enfrentado, como el encarcelamiento de Iñaki y su complicado divorcio con la infanta Cristina.
La pareja se acerca por esto.
El ascenso de Pablo Urdangarin como una figura reconocida no ha sido una casualidad. Con paso firme, ha ido ganando terreno y se ha convertido en el candidato más probable a famoso de la tercera generación Borbón.
Detalles
El fichaje del hijo de la infanta Cristina por el Granollers, tras finalizar su contrato con el Barcelona, le brinda la oportunidad de jugar en el primer equipo y aspirar a formar parte de la selección nacional.