En el mundo del coleccionismo, los cromos siempre han sido objetos codiciados por su carácter nostálgico y su capacidad para capturar momentos históricos. En el ámbito deportivo, uno de los países más fanáticos de este pasatiempo es España. En el año, los coleccionistas de cromos españoles se desvivieron por conseguir el cromo del Mundial de Fútbol de 2010, un auténtico tesoro.
A lo largo de la historia, el fútbol se ha convertido en una de las mayores pasiones de los españoles. Por ello, no es de extrañar que el cromo más vendido en España durante el presente año haya sido el del equipo de fútbol nacional que se consagró campeón del mundo en Sudáfrica hace ya más de una década.
Este cromo en particular muestra al capitán del equipo, Iker Casillas, tras la victoria de la Copa del Mundo ante los Países Bajos en la final. La imagen, llena de alegría y emoción, captura el espíritu de un país entero celebrando el logro deportivo más importante de su historia.
Este cromo en particular muestra al capitán del equipo, Iker Casillas, tras la victoria de la Copa del Mundo.
Según "El País", el alto precio de este cromo se justifica por su escasez y por la demanda de los fanáticos coleccionistas. Se estima que su costo oscila entre los 5.000 y los 10.000 euros en el mercado actual, dependiendo de su estado de conservación.
Su valor real
Además, este cromo ha sido considerado como un objeto de valor histórico y sentimental, lo que ha impulsado su demanda entre los aficionados del fútbol y los coleccionistas en todo el territorio español.