En el mundo de la numismática, hay ciertos ejemplares que son de los más buscados por los coleccionistas. Sucede que las monedas tienen su particularidad, pero hay algunas que sobresalen del resto.
Eso ha quedado demostrado con una de las monedas más codiciadas por los amantes del coleccionismo. Se trata de la moneda de pesetas que fue acuñada en el año 1994.
Según detalla el sitio de “El Debate”, este ejemplar ha cautivado a los coleccionistas debido a que en ellas no aparece la estrella ni la efigie del caudillo. De esta manera, por su rareza y especialidad, la moneda ha sido valorada en las subastas, alcanzando hasta los 1.100 euros de valor.
Los coleccionistas pagan un buen dineral por alguno de estos ejemplares.
Pero esta no es la única de las monedas valoradas en el mundo de la numismática. Sucede que la peseta rubia de 1947 también es otra de las más codiciadas por los coleccionistas. En este caso, el interés por esta moneda con la imagen de Francisco Franco se debe a que en la parte posterior aparece una imagen diferente a la de 1946. La divisa llegó a cotizar 1.750 euros en algunas subastas.
Una de las más caras
Por su parte, otra de las monedas valoradas por los aficionados a la numismática es la peseta acuñada en 1946. La particularidad de esta moneda reside en que es una de las primeras en retratar la imagen de Francisco Franco con busto diferente a las acuñadas en los años posteriores. La gran demanda de este ejemplar explica que alcance valores de hasta 3.000 euros en el mercado del coleccionismo.