Existen muchas monedas antiguas, raras o emblemáticas que son buscadas por los coleccionistas. Y en esta oportunidad nos referiremos a cuatro piezas que, por qué no, podrías tener guardada en algún rincón de casa sin saber que, de ser vendidas, podrían significarte un interesante ingreso económico.
Una de estas monedas no es otra que la de un euro del Vaticano, acuñada en 2002. En uno de sus lados se observa la efigie del papa Juan Pablo II. Desde el medio "Casacochecurro", indican que el ejemplar ha sabido cotizar en el mercado numismático por un valor de hasta 125 euros. Su precio, sin embargo, ha descendido un poco en los últimos tiempos y, en caso de no estar en circulación, su valor puede trepar a los 80 euros.
Otra de las monedas a mencionar es la de un euro de Mónaco, acuñada en 2009. El perfil del príncipe Alberto II decora uno de sus lados y, cabe mencionar, se emitieron no más que 8.000 piezas. Por esto es por lo que hace un tiempo su valor en el mercado de subastas alcanzó los 129 euros, pero ha descendido en la actualidad a los 50, reseña el portal ya mencionado.
También ha de mencionarse la moneda de un euro de Portugal, acuñada en 2008. Trascendió que costaría hasta 105 euros y esto se debe a que posee un error de impresión en el mapa impreso en uno de sus lados. Vale remarcar, eso sí, que muchas subastas online la venden por un promedio de 52 euros. Sin duda, se trata de un ejemplar que muchos ciudadanos podrían tener guardado en viejos monederos.
Una más
Asimismo, cabe señalar otra de las monedas del Vaticano si de numismática hablamos. Se trata de la moneda de un euro, acuñada en 2005. En uno de sus lados se ve grabado el escudo de armas del jefe de Estado de la ciudad papal, el Cardenal Camarlengo. ¿Su valor? Podría alcanzar hasta los 90 euros, detalla la referida publicación.