En los últimos años, al igual que las monedas, los sellos postales se han convertido en auténticos tesoros cuidadosamente atesorados por muchas personas. La razón detrás de este fenómeno es la creciente conciencia de la enorme cantidad de dinero que se puede ganar gracias a estas piezas a menudo olvidadas en nuestros hogares.
Uno de los sellos postales más destacados es el DOLLARI, conocido por su rareza, que radica en su nombre escrito en mayúsculas. Se trata de uno de los objetos más codiciados de la filatelia.
Sorprendentemente, solo se conocen 15 ejemplares de este sello en el mundo, lo que ha llevado a que los amantes del coleccionismo estén dispuestos a desembolsar cerca de 40.000 euros para agregarlo a sus colecciones.
Pero este no es de los únicos sellos postales valiosos. En segundo lugar, encontramos los codiciados trípticos de Balbo. Estos sellos inicialmente no tuvieron una gran aceptación debido a su alto costo, que los hizo inaccesibles para muchos y hoy altamente codiciados por los coleccionistas.
Estos son dos de los sellos postales más valiosos de la filatelia.
Valor
Sin embargo, esta misma exclusividad ha llevado a que los coleccionistas busquen a los afortunados poseedores de estos sellos postales y ofrezcan sumas astronómicas, llegando hasta los 55.000 euros, una cifra que prácticamente nadie podría resistirse a aceptar.