Polonia tiene verdaderas joyas de la filatelia, sellos postales que encierran grandes historias. Uno de ellos es el sello Franqueo ultramarino 1K con sobreimpresión de Cracovia, 1919. Está entre las rarezas más grandes del país, en parte porque solo se imprimieron 80. Un ejemplo menta ‘premium’ con un color increíble se ofreció en septiembre de 2008 en la casa de subastas de Spink. Este lote estaba entre los mejores de esos 80.
Según registra "findyourstampsvalue.com", se firmó varias veces y acompañó de un certificado Kronenberg de 1992, el franqueo 1919K Ultramarine de 1. Su precio llegó a los 4.500 dólares (4.242 euros). Este es solo uno de los sellos postales más valiosos del mundo. Hay varias razones por las cuales un coleccionista se decanta por comenzar a guardar objetos como estos.
Por qué un coleccionista guarda sellos postales
Hay coleccionistas de sellos postales, monedas, joyas, pintura y un largo etcétera. Las razones que los llevan a hacerlo son muchas. Una de ellas es que cada objeto puede encerrar un valor histórico o sentimental que no se compara con ninguna otra cosa. Por otro lado, otros individuos lo ven como una inversión.
Cuanto mejor conservado este el artículo más dinero se otorgará por él.
Compran sellos postales u otro objeto por un valor y esperan a que pase el tiempo esperando que se revalorice. Cuanto mejor conservado este el artículo más dinero se otorgará por él.
Sea como fuere, el mercado del coleccionismo cada vez se expande más y existen más interesados o interesadas en abrirse en un camino.